Redacción: Luis Miguel Plá.
El técnico madridista pasó esta noche por los micrófonos del programa El Partido de las 12 de la COPE, donde analizó la situación actual del Real Madrid de basket. Después de una temporada histórica con el pleno de títulos, los blancos han notado el esfuerzo y la falta de pretemporada, lo que ha provocado que empiecen el presente curso con dos derrotas consecutivas. Para Laso es cuestión de tiempo que el equipo vuelva a reencontrarse y ha mostrarse como el año pasado.
Las primeras derrotas de la temporada
«Siempre estamos en crisis. Siempre hay quilombo».
Su cumpleaños
«El mayor cambio fue el paso de jugador a entrenador. Ahora se pasan muy rápido. Los títulos siempre se llevan mejor».
Las tres primeras derrotas
«La verdad es que hemos perdido tres partidos en una semana. Con Unicaja en la Supercopa, que estuvieron muy bien, Con Boston Celtics, un equipillo, y Valencia Basket, uno de los que más se ha reforzado. Estamos en un momento de la temporada que para nosotros es casi pretemporada».
Poca preparación del equipo
«El final del Europeo lo vivimos todos muy contentos por la victoria de España, otro en la final y otros dos que llegaron cuatro días antes. Todos han estado muy bien con sus selecciones, todos han cumplido muy bien con sus selecciones. Nos llegan y tenemos que montar en 48 horas para Brasil para jugar un trofeo importante. Da mucho valor sacar este título. Y solo han pasado quince días. Tenemos que reencontrarnos como equipo».
Piensa en el equipo, no es su situación
«En el trabajo de entrenador, desde que empecé, lo vas a aprendiendo día a día. No es algo que decides. La experiencia te va engrandeciendo y te hace entender las cosas. En Valencia me echaron. Yo nunca he intentado vivir pendiente de mi situación personal. Eres entrenador de un equipo y hay muchas situaciones que pueden ser buenas o malas para el entrenador, pero vive siempre en entredicho».
Análisis de la temporada pasada
«Siempre pienso que tengo opción de ganar. El inicio de la temporada fue muy extraño. Creo que ganamos hasta diciembre ganamos ocho partidos en liga, íbamos líderes en el grupo de Euroliga, y no veía bien al equipo. Llegaron las lesiones de Rudy y el Chacho, más el bajón de varios jugadores, y encajamos unas derrotas que nos hicieron cambiar aspectos que teníamos que recuperar. A partir de diciembre acepta esto el equipo y va hacia arriba. La Copa del Rey es un punto de inflexión. Llegamos en el mejor momento de la temporada en la Final Four y en los playoffs, son en junio, y nos costó entrar al nivel competitivo».
Los nuevos retos
«El deporte está hecho para esto, para asumir retos. Ya no podemos ganar la Supercopa, por lo que a nivel de resultados ya no va a ser igual. Pero hemos ganado la Intercontinental, que era importante».
Su vida fuera del basket
«Yo tengo mis momentos buenos y malos. Ayer estaba cabreado como una mona. A veces ganamos y me voy cabreado porque no me ha gustado. Tengo que reflexionar en lo que tenemos que mejorar. Pero tienes una vida fuera del deporte. Estoy muy contento de lo que hemos conseguido en el equipo, pero no me gustaría que me cambiara. Hace cuatro años me entrevistasteis y me preguntasteis que si venía a ganar la Copa de Europa. Era de risa. Me hago mayor, pero hay cosas más importantes».
El equipo de fútbol
«No tengo ni idea de fútbol. Me encanta verlo, apoyo al equipo y tenemos al mejor equipo del mundo, pero aceptar esa exigencia es muy difícil. Tenemos un gran equipo de fútbol y tengo muchísimo respeto. Estoy convencido de que harán una gran temporada».
La exigencia del club
«Es normal, el Madrid tiene una exigencia. No creo en el Madrid que sale a ver qué pasa. Acepto esa exigencia. No me creo mejor que muchos en Europa, pero sí que les puedo ganar».
Enfermo del baloncesto
«Un poco. Intento sacar mis huecos para distraerme, pero es difícil. Duermo muy poco y estoy viendo partidos y rivales, o un partido de la NCAA porque me puede valer. Esto es normal».
Duerme muy poco
«No duermo más de cinco o seis horas, pero necesito siesta. Necesito una hora por la tarde para desconectar. Pero no duermo mucho por la noche».
Florentino Pérez y el baloncesto
«No, soy una guinda dentro de muchas guindas. Juan Carlos Sánchez y Herreros llevan la sección y hable con ellos. Era para hablar de baloncesto y vieron en mí lo que querían. Eso se lo transmiten a Florentino y lo que me gusta del presidente es que ve y vie los partidos. Me llama después de los partidos. Eso me gusta porque nos sigue y nos apoya».
Lo que le dice Florentino
«Siempre me dice que Jaycee tiene que meter más triples, y tiene razón. Pero juegas contra otros equipos. Sabe que tenemos grandes jugadores, pero si no haces gran equipo no podrás competir. En este momento debemos aprender».
Orgulloso de que en Boston conozcan al equipo
«No creo que por ganar suba la autoestima. Me siento orgulloso de hablar con Brad Stevens y que conozca perfectamente tu equipo. Sabe lo que es el Real Madrid y es autoestima del equipo».
Futuro en la NBA
«Ya he estado. Estudié de crío. Puede ser, es un atractivo, pero no pienso muy lejos. No pienso en el futuro. No empecé pensando que entrenaría al Madrid. Me gusta tanto el baloncesto que cuando no estoy entrenando y estoy descansando pienso en balón cesto o veo baloncesto. Lo que pase en el futuro no lo pienso. Pero la NBA, para el mundo del baloncesto, es un escaparate máximo. Pero en el Real Madrid soy feliz».
Consejos para los chavales
«Lo primero, que le guste mucho, porque sin eso no tendré capacidad de sacrificio para entrenar y jugar. Tienes que ser capaz de dejar otras cosas. Lo he vivido con compañeros, que hay entrenamiento a la hora de quedar con las chavalas. Te tiene que gustar mucho porque te va a hacer gran jugador».
Su día perfecto
«El día perfecto es dormir poco, me levanto, desayuno, me voy a entrenar, pereparao el partido, me voy a comer con la familia, me bajo al Palacio, me junto con el equipo, jugamos, ganamos y me voy a cenar. Y si puedo me tomo una copa y me voy a engancharme a un partido de la NBA».
Las salidas de Rivers y Slaughter
«Te trastoca los planes. La de K.C., en el momento que fue, se movieron rápido para traer lo mejor posible, Jeff Taylor. Le seguíamos desde hace mucho y teníamos margen de maniobra. Te trastoca, pero estamos muy contentos pese a la lesión. Lo de Marcus me trastoca más. Es el primer día de pretemporada. Era un jugador que trasmitía mucho al equipo. Muchas veces solo se valoran dentro y no tanto fuera, y solo se valora fuera cuando pasa el tiempo. Lo bueno que tenía es que, aparte de lo que transmitía al grupo, es que había que enganchado al madridismo. Ramos me dijo que Marcus tenía que ir a la final de Lisboa. Y nos daba una rotación importante».
El respeto a los rivales
«Sí, eso no significa que hayamos ganado o perdido, pero es humano. Hay partidos que crees que vas a ganar, juega a muerte y es una lucha muerte en cada día. El día de la final con Olympiacos, respetas a Spanoulis y juegas a muerte. Ese respeto te lo da el rival. No debemos perder eso, debemos respetar a los rivales. Lo hemos hecho, pero hemos mejorado mucho y respetamos a los rivales, a los árbitros…».
La derrota en la Supercopa
«Nunca creo que perder es positivo, ganaría todos los días. Pero es inevitable no ganar siempre. Lo importante es cómo reaccionas. Hay veces que no estás bien y ganas, y es más difícil hacer ver al equipo que las cosas no están bien. Como entrenador me pongo ese baremo, no me puede valer el resultado. Hemos perdido la Supercopa, quería ganar, pero Unicaja fue mejor, jugó con gran motivación y ganó el Barcelona. Nuestro reto es clasificarnos para el Top16 e ir poniendo pruebas para ganar títulos».
Una liga de dos
«Nunca he creado en la liga dual. Es mentira. El Baskonia, Unicaja, Valencia quieren ganar la liga. Todos quieren ganarte. No entiendo que ninguno piense en no ganar. El Madrid y Barcelona han hecho las cosas bien y lo fácil es decir que económicamente… Por esa regla de tres, entrando en el Top 8 deberíamos estar contentos. No entiendo eso. Entiendo que tener más dinero te hace mejor equipos. Pero eso también pasa en el Supermanager».
Reyes es un ejemplo
«Felipe, con 48, todavía estará dando clases. Felipe es un ejemplo de profesionalidad, de querer cada día, de querer ser mejor y saber que vienen por detrás queriendo su puesto. Me quito el sombrero porque creo que Felipe, en muchos aspectos, es un espejo para los chavales. Mira a Felipe Reyes, peleando por cada balón. Me gustaría saber el secreto».