Aunque no podemos decir que fue un mal desempeño del nigeriano, el fuera de juego que anuló el gol que daría ventaja a su equipo no lo dejó brillar como esperaba.
El Arabi se mantuvo cerca de la portería de los merengues y ahí estuvo en varios “casi-casi” que no se concretaron uno por estar fuera de juego, según el arbitraje, y otro porque la pared Navas no se lo permitió. Sin embargo su constancia puso a sudar a los blancos en más de una ocasión y sirvió para que Keylor demostrara porque está defiendo las redes del Real Madrid.