85-69: El Real Madrid asegura el factor cancha y arrolla a un Barça impotente

Maria Luz Domínguez – Palacio de los Deportes (Madrid)

Enorme exhibición la del Real Madrid esta noche al derrotar al Barcelona Lassa por un contundente 85-69. Los blancos con Llull como líder indiscutible se llevaron el segundo clásico en diez días, aseguraron el factor cancha y sin mucho esfuerzo certificaron el adiós del Barcelona a la competición europea.

Desde el primer minuto de partido el Madrid salió a por el partido ante un Barcelona Lassa descafeinado. Los de Laso comenzaban el choque muy acertados desde la línea de triples gracias en parte a la buena circulación de balón entre los jugadores exteriores. Al Barcelona le costaba mucho hacer canasta y se mantenía en el marcador gracias a los triples de Koponen (22-13 min 10). Los primeros minutos del segundo cuarto fueron los de la leve reacción culé. Un parcial de 0-7 para los catalanes ajustaba el marcador pero Llull, brillante una vez más junto con Hunter y Randolph desvanecían toda esperanza culé de dar la vuelta al luminoso. El banquillo del Barça se convertía entonces en protagonista, Bartzokas perdía los papeles encarándose con Lamonica, uno de los árbitros y era expulsado por doble técnica. Para entonces el Madrid jugaba a medio gas dominando y siendo muy superior al Barcelona al descanso. Llull una vez más desataba la locura con un triplazo desde 10 metros sobre la bocina (41-27 min 20).

En el tercer cuarto el juego se volvió más duro. Llull seguía liderando a los blancos mientras que en el Barcelona hacían buenas acciones en la pintura Rice y Tomic. El Madrid se daba un festín desde el 6,75 con varios triples casi consecutivos a los que daba respuesta Oleson y Perperoglou. Aparecía entonces Ayón para dominar el aro rival y ampliar la ventaja blanca hasta los trece puntos al final del tercer cuarto (64-51). Con todo decidido comenzó el último cuarto. El Madrid jugaba a placer convirtiendo 21 de 30 en tiros de dos y 11 de 34 en triples. Un Barcelona desesperado y sin ideas poco más podía hacer acabando el partido con feas acciones como el codazo de Tomic a Carroll que los árbitros sancionaron erróneamente con técnica para el jugador blanco. Los culés reflejaron la impotencia de una mala temporada en Euroliga acabando el partido con 18 pérdidas de balón. El Madrid certificó un triunfo claro (85-69) con el que asegura el factor cancha en playoffs.

 

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