Redacción: Jorge Gómez-Manzanilla-Abel Alaminos-Pedro Cánovas/LaNocheDelDeporteEspañolTV-deporteolimpico.net-blogolimpico.com/ Imágenes: La Liga Sports
A pesar de no haber sido competidor olímpico, el gran impulsor del Plan ADO y del éxito de Barcelona 92 junto al presidente del COI, Juan Antonio Samaranch, fue sin duda, Carlos Ferrer Salat, presidente del COE desde 1989 a 1998 y que dejó su herencia olímpica además de las medidas que dotaron a España de esas ayudas económicas para ser sextos en Barcelona 92 y demostrar que España estaba entre las mejores, en su hija, Beatriz Ferrer Salat que en Atenas 2004 lograría en Hípica en la modalidad de Doma Clásica, una especie de Gimnasia para Centauros, tal y como la define Fernando Carreño en su libro, Héroes Olímpicos Españoles, dos medallas, la primera por Equipos y la segunda en Individual.
En el caso de la medalla por Equipos, el equipo español formado por Rafael SOTO, Ignacio Rambla, Juan Antonio Jiménez y la mencionada Beatriz Ferrer Salat lograron ser diploma olímpico en Sídney 2000 y como siempre decimos, en las siguientes olímpicas, el gen ganador de los deportistas los hace superar los resultados olímpicos anteriores.
En el ciclo olímpico a Atenas 2004, España fue Bronce por Equipos en el Mundial de Jérez de 2003 y además, Beatriz fue Plata en Individual a lomos de Beauvalais, un caballo tildado de salvaje e indomable pero el preferido de la jinete española y que sólo ella sabía domar.
En cuanto a la competición por Equipos, Rafael Soto a lomos de Invasor e Ignacio Rambla a lomos de Oleaje realizaron dos grandes actuaciones que en el caso de ser descartable, se descarta la peor, no bajan posiciones con respecto a sus rivales.
Al día siguiente fueron Juan Antonio Jiménez con Guizo y sobre todo, Bea Ferret con su Beauvalais quienes remataron una gran actuación de España que con 74,667 puntos dieron a España la medalla de Plata siendo solamente superados por Alemania que fue Oro mientras que Estados Unidos fue Bronce. Era la tercera medalla de la Hípica española en unas olimpiadas tras ese Oro y Plata por Equipos de los años 20 y 40 con el gran Navarro Morenés que con dos medallas fue durante mucho tiempo, el deportista olímpico español más laureado. A Bea Ferrer Salat, le quedaba otra oportunidad, en individuales, para igualar al mítico militar español.