Redacción: Jorge Gómez-Manzanilla-Abel Alaminos-Pedro Cánovas/LaNocheDelDeporteEspañolTV-deporteolimpico.net-blogolimpico.com/ Imágenes: Efe.com
Con la llegada de la crisis económica de 2008, la más dura de nuestra joven democracia, se esperaba una bajada de rendimientos para España debido a que las ayudas al deporte se congelaron y a los deportes menos mediáticos la falta de ayudas suponían un caos, el perder una medalla o un diploma olímpica.
Sin embargo, la fe y la perseverancia además de el gen innato de campeón o en este caso, de campeona, no afectó a una joven prodigiosa que nos dio la natación, hablamos de Mireia Belmonte, una niña nacida en Barcelona en 1990 y que con 8 años pedía autógrafos a Nina Zhivanevskaya, medallista olímpica en Sídney 2000 y que al igual que el entrenador de Mireia, Fred Vergnoux vieron el talento de Mireia y en el caso de Nina, ejercía de tutora deportiva.
Y es que antes de acudir a Londres 2012, Mireia ya era toda una realidad ya que con sólo 18 años era campeona del Mundo Júniors en 400 libres y 400 estilos, campeona de Europa en 200 libre y 400 estilos, además de olímpica en Pekín 2008 aunque no lograra metal.
Cuatro años después en Londres 2012, sí había hecho los deberes en el ciclo olímpico, tres europeos y seis mundiales todos ellos en piscina corta de 25 metros que aunque no era olímpica, si daba caché al palmarés y más con 20 años. De hecho, en el mundial de Dubai 2010 logró tres Oros y una Plata y prometió medalla olímpica para Londres.
De hecho, Fred anunció que competiría en cuatro modalidades y sólo descartaron los 200 libres estando presentes en 200 y 400 estilos, en 200 mariposa y 800 libre, no fallaron y estando en las cuatro finales.
Sin embargo, en los 200 y 400 estilos no logró metal algo que no la desanimó sino todo lo contrario, la motivó a luchar por conquistar dos medallas en los 200 metros mariposa y 800 estilos.
La primera de ellas, la que además inauguraba el casillero de las medallas para España en Londres 2012, llegaría en 200 metros mariposa y lo haría frente a la china Jioa Liuyang, la japonesa Natsumi Hoshi y la estadounidense Kathleen Hersey.
Y no fue una final sencilla algo que ya sabía Mireia y por lo tanto, atacó desde la salida, consciente de que era mejor fondista que sus rivales llegando incluso a ser primera en los giros segundo y tercero y finalmente siguiendo medalla de Plata por sólo 23 centésimas.
De hecho, mejoró un segundo su récord de España pasando del 2:06.25 al 2:05.25, una marca que le valió la mencionada medalla de Plata, la primera de las cuatro que lograría Mireia en unos Juegos Olímpicos, la que abría el cajón de los metales para España en Londres 2012 y la primera de las dos que tras las finales de 200 y 400 libres, se había conjurado junto a Fred y Nina para conseguirla, al menos ellos, no eran incrédulos y confiaban en la capacidad de ese prodigio de la naturaleza de sólo 22 años llamada Mireia Belmonte.