Jesus F. Ibias
Una primera parte dominada en su totalidad por el equipo blanco que no supo materializar las ocasiones, tres muy claras. El partido comenzó con los lógicos nervios de un choque de esta índole, hasta que el Real Madrid puso en marcha la sala de máquinas con Kroos y Modric como eje principal y Bale y Benzema dando amplitud al campo. Cuando han aparecido estos dos últimos, el Madrid ha movido bien el balón y ha tenido las mejores ocasiones.
La segunda parte comenzó muy bien para el equipo blanco, con ataques continuos y encerrando al Atleti que no podía quitarse de encima la presión blanca. Hasta que en el minuto 52 una falta botada por Kroos desde la banda derecha la remata Pepe al fondo de la red. A partir de aquí el Madrid siguió atacando con más posesión que ocasiones, intentando llegar a la portería contraria pero sin remate. Los cambios fueron en esta dirección, quitando a Kroos para dar entrada a Isco, entendiendo que si se tiene la posesión no te van a hacer daño. Pero con lo que no se contaba es con la efectividad en los cambios del equipo contrario. Los dos cambios anteriores al gol le dieron al Atleti una bocanada de aire que supo aprovechar Griezmann en el 85 con un pase filtrado entre Carvajal y Nacho para establecer el 1-1 y así demostrar al equipo blanco que, mientras que se pueda, hay que cerrar los partidos marcando y no dejando oportunidades. El Atleti tuvo dos ocasiones en el partido y metió una, mientras que el Madrid, seis claras y bien sea por falta de puntería, bien por Oblak, o por sus defensas, en la primera parte Savic le sacó un remate a cristiano bajo palos, no pudo plasmar en el marcador lo que se había visto en el campo.
En el conjunto del partido el Real Madrid mereció ganar, jugó mejor, tuvo mas ocasiones, pero esto es el fútbol, te llegan dos veces y te empatan casi sin merecerlo. Ahora toca pensar en la batalla de Múnich, otro campo donde se espera la mejor imagen del Real Madrid, esa imagen que hoy se ha visto en tramos del partido pero que tiene que ser constante durante los noventa minutos. Todo preparado para nuestra competición, de la que somos los auténticos dueños. HALA MADRID