CON PIE Y MEDIO EN CUARTOS

Crónica-Redacción:Noelia Pinto Cervero-Veltins Arena-LaTribunaMadridista

El Real Madrid dio un paso de gigante para superar los octavos de final de la Liga de Campeones tras derrotar (0-2) al Schalke 04 en el partido de ida, celebrado en Gelsenkirchen, gracias a los goles de Cristiano Ronaldo que acabó con la sequía casi un mes después, y de Marcelo, que firmó un soberbio derechazo que besó la escuadra.

Los de Ancelotti, ataviados con la estridente camiseta rosa, no pudieron pintar del mismo color su horizonte. El tibio triunfo, aumentado por el zapatazo de Marcelo a diez minutos para el final, no sirvió para ocultar el peor momento de los merengues, apagados en su línea más feroz, la que forman la temida BBC: Benzema, Bale y Cristiano.

El portugués, ávido por demostrar que la sequía nunca terminó de preocuparle, fue quien rompió la defensa minera en el ecuador del primer acto. Sin embargo, ni el de Madeira, ni el ‘expreso de Gales’ pudieron traducir su fortaleza y velocidad para librarse de los rivales. Para colmo, la gripe que azuzó ayer a Benzema hizo que los tres de arriba evidenciasen una importante rémora física.

Aún así, la calidad de los blancos y la escasa entidad del Schalke –pese a ocupar la cuarta posición en la Bundesliga– permitió que los de Ancelotti se adelantaran con un cabezazo de Cristiano a los 26 minutos. Un centro medido de Carvajal terminó en la testa del actual Balón de Oro. Ronaldo no falló ante el joven Wellenreuther y inauguró la cuenta.

El gol relajó las intenciones del Real Madrid, cuyo inconsciente le llevaba por obligación al 1-6 conseguido hace justo en año en el camino a la ‘Décima’. La abultada goleada dio pie al error, la cual se sumó al mal estado del terreno de juego y a la escasa aportación de Lucas Silva en el centro del campo. El brasileño debutó sin pena ni gloria al calor de Kroos.

El alemán sí que fue la brújula que todo equipo necesita en la cocina. Espoleado por hacerse notar ante su público –al igual que Carvajal, viejo conocido de la Bundesliga– repartió tanto juego como pudo en un equipo que sigue estando espeso en los metros finales. Sin frescura en las piernas para generar situaciones de superioridad, los de Ancelotti volvieron a toparse contra su peor enemigo: la falta de ideas.

El partido se enroscó en una dinámica aburrida para el espectador, sobre todo porque el Schalke tampoco revolucionaba el gallinero. Benzema falló en un disparo dentro del área y el jovencísimo portero alemán impedía a Cristiano su completa resurrección hasta que Platte, el sustituto de Huntelaar a la media hora, estrelló el cuero en el larguero.

El ‘duende’ de Casillas y el rechace de Uchida, que no cogió portería, terminaron por confeccionar el bagaje de ocasiones de los germanos. La ocasión, que pudo ser el 1-1, no llegó a buen puerto y el balón regresó a los dominios del Madrid. A falta de diez minutos, Marcelo estableció el definitivo 0-2 y tumbó cualquier opción de pronunciamiento local.

El brasileño marcó un soberano gol y cerró un triunfo que deja en verde el semáforo de la clasificación. Los madridistas jugarán la vuelta en el Santiago Bernabéu sabiendo que el Schalke deberá ganarles por tres goles de ventaja si quiere pelear la batalla. El Madrid, por su parte, da un paso más hacia la ‘Undécima’.

About admin